Las pastas rellenas son una de las genialidades de la cocina italiana y los tortelloni funghi porcini son el perfecto ejemplo de ello. Y es que el contenido de esta pasta la ha convertido en mundialmente famosa. Las setas porcini que se utilizan en este plato son originarias de los bosques del norte de Italia. Este fruto de la tierra es una exquisitez que impresiona, no solo por su sabor, que recuerda a la nuez o las almendras, sino por su suave textura y su color ocre brillante.

Toda la magia de estos hongos fusionada con la tradicional pasta al huevo, hacen que comer los tortelloni sea un disfrute de principio a fin. Además, este clásico puede potenciarse con las más variadas salsas, especialmente aquellas hechas a base de crema de leche o queso ricotta, que equilibran perfectamente las notas silvestres de este plato.