Formato típico de la tradición romana, los Rigatoni se caracterizan por las rayas en la superficie externa y por el importante diámetro y grosor.

Es un formato particularmente versátil que se adapta bien a varias salsas con tomate o vegetales, pero los condimentos más apropiados son las salsas a base de carne: estofado, salsas de carne y champiñones, carne de res y cerdo, salchichas o ragú de menudillos.

Es clásica la receta de Rigatoni con la pajata.

Sin embargo, se recomiendan todas las salsas que sean suficientemente líquidas para poder fundirse con las estrías de la pasta.